viernes, 8 de octubre de 2010

Volver a Australia

Volvemos a Australia pero en el recuerdo, para seguir con lo que dejamos atrás hace más de un mes. Hemos hecho los deberes, ha costado, cuando vuelves a casa ya no tienes mucho tiempo libre y da bastante pereza escribir, la motivación no es la misma que tenías estando de vacaciones pero al final hemos conseguido acabar el trabajo.
El martes 10 de agosto nos trasladamos a Port Douglas, a una hora de autobús desde Cairns. Port Douglas es una pequeña localidad turística, tranquila en esta época del año, en la que lo único que puedes hacer es visitar su playa, sus tiendas y la Gran Barrera. Esa era nuestra intención, visitar de nuevo y durante dos dias seguidos el arrecife.
Las compañías que escogimos para visitar la barrera fueron siempre diferentes, así conseguíamos visitar zonas distintas.
El miércoles 11 de agosto nuestro destino era Opal Reef, en plena barrera de coral. Teníamos por delante una jornada de más de una hora de viaje, cinco horas zambullidos en el agua y de nuevo otra hora larga de vuelta a tierra. Empezamos mal el día, el barco en el que teníamos que viajar se había averiado el día anterior y tuvimos que viajar con otra compañía y en un barco con el doble de gente pero fué un detallazo que la primera compañía se ocupara de recolocarnos y no hacernos perder el día. Además amaneció nublado y a medida que nos acercabamos a nuestro destino el cielo se oscurecía más y más.
Llegamos a la Gran Barrera. Agua, agua y más agua. Estabamos en medio del oscuro mar y se suponía que allí teníamos que pasar cinco horas !!! Con el día tan nublado el mar estaba oscuro, resultaba siniestro. De nuevo, equipados con nuestros artilugios acuáticos, nos sumergimos en aquella masa de agua pero en el momento en el que introduces la cabeza dentro del agua todo cambia, abajo te espera un inmenso jardín y un gran zoológico acuático, lleno de vida, lleno de colores, vas de un lado a otro descubriendo nuevas cosas, viendo nuevos animales y de repente te das cuenta que te están llamando desde el barco, ha llegado la hora de comer y eres la última en subir al barco.
Comes rápido, la comida tampoco es gran cosa o sea que acabas rápido. De nuevo vuelves al agua, nadas arriba y abajo y persigues a los peces con la cámara acuática de usar y tirar que te gustaría que hiciera unas buenas fotos para recordar el momento pero que en realidad hace unas fotos de lo más chungas.
La marea comienza a bajar, has de tener cuidado para no quedarte encerrada en alguna zona en la que después no puedas salir por falta de agua, no puedes pisar los corales y no te pueden rozar, cortan como cuchillos. En busca de aguas profundas encuentro a Willy Fog que continuamente nada de un lado a otro, no es fácil encontrarlo, no para quieto y entre la gente sólo lo puedo diferenciar por su tubo de bucear azul.
Levanto la cabeza. Otra vez me llaman desde el barco, he de volver. Esta vez no soy la última ... sólo la antepenúltima. De verdad han pasado 5 horas ? no me lo puedo creer.
Tortuga en el fondo marino. Después de unos minutos en el agua suben a la superfície para respirar.
Tiburones a nuestro alrededor, inofensivos para el hombre pero después de observar como devoraba a un pez opté por moverme lo mínimo posible ... por si acaso.Más fotos del fondo marino. No son nada buenas pero me entusiasma recordar el momento, incluso en alguna se ve un fantástico pez loro.


Baja la marea. La distancia entre el arrecife y la superfície es mínima.
El jueves 12 de agosto amaneció de nuevo nublado. En catamarán nos dirigimos a Low Island, una isla cercana a la costa, un buen lugar para ver tortugas. El viaje en catamarán es lento y a pesar del corto trajecto necesitamos algo de tiempo para llegar, el suficiente como para que el cielo se despeje y salga el sol.


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